Exijo una explicación

20th Century Fox

Después de revisar la cobertura de LaTercera.cl (es el único medio chileno online al que pude acceder hoy desde Australia, el resto están "caídos") acerca de la muerte del empresario Ricardo Claro, me quedan los siguientes "exijo una explicación":

1. El artículo en cuestión reza:

"... el empresario Ricardo Claro Valdés, fallecido la madrugada del martes en su domicilio en San Damián, comuna de Las Condes"

Para luego indicar que

"Tras presentar molestias, fue trasladado a un recinto asistencial, falleciendo alrededor de las 4 de la madrugada"

Ergo, el Sr. Claro vivía en un recinto asistencial...

2. Notables declaraciones del rector de la UC, siempre y cuando sean efectivamente atribuibles a él:

"Pedro Pablo Rosso, rector de la Pontificia Universidad Católica, dijo que Claro fue un hombre identificado con los valores de la universidad..."

Es difícil de asumir tal adjetivización del empresario al contrastarla con el siguiente párrafo publicado en el mismo artículo:

"El empresario, fue quien reveló la grabación que desató el denominado caso Piñera-Gate. Claro fue abogado, licenciado de la Universidad de Chile en 1958"

El estilo lisonjero utilizado por La Tercera es bastante evidente, cayendo en descripciones banales como la siguiente:

"Fue el único empresario convocado por la Presidenta Michelle Bachelet para formar parte de la delegación que visitó al Papa Benedicto XVI en el Vaticano en octubre del año pasado. El empresario fue el integrante de la comitiva que más tiempo ocupó en saludar al pontífice."

Claro que claro fue uno de los claros referentes del quehacer empresarial chileno, y del clan Claro, pero aun así no me explico tamaña cobertura de su muerte. Este es el reflejo de por qué Chile está extraviado como país: una docena de connacionales son más importantes e influyentes que todos los demás juntos, dando pie a los sabidos problemas de "poco chorreo de los ingresos", "marcadas diferencias sociales" y "odio intrínseco hacia los sectores más influyentes del país".

Para cerrar, me quedo con el comentario de un amigo en Viña hace unos 8 a 10 años atrás, de haber visto al Sr. Claro con su señora comprando empanadas para el almuerzo en el Unimarc de 7 norte. Según él, lo vio como un hombre hosco, solitario, amarrete y muy individualista. No se si habrá sido verdad, pero no me extrañó en lo más mínimo. Descanse en paz, Sr. Burns chileno...